¡Oh, sorpresa!, siete piernas humanas dentro de varias fundas en el Parque Mirador Norte

SANTO DOMINGO.-La aparición de siete piernas y otros restos humanos en varias fundas en el Parque Mirador Norte representan un serio peligro para la salud de la ciudadanía, situación que se agrava con los recientes aguaceros que esparcen dichos cuerpos por poblaciones y barrios donde pueden propagar enfermedades y epidemias. Los restos al parecer fueron lanzados en el lugar por empleados del hospital de seguro, conocido como Salvador B Gautier, según unas equiquetas halladas junto a los desechos.

DETALLES
Un reportaje sobre el tema de la periodista Deyanira Polanco, del Listín Diario sostiene que el hallazgo de los desechos humanos implica una irresponsabilidad y violación a los protocolos y normas de salud sobre el manejo de ese tipo de desecho.

El planteamiento fue hecho por el epidemiólogo José Agustín Sehouerer, al preguntarle sobre las siete piernas humanas en estado de descomposición que fueron lanzadas en fundas plásticas, próximo a la puerta cinco del parque Mirador Norte, en Santo Domingo Norte.

“Eso es grave porque refleja una violación a todos los estamentos y leyes sanitarias de nuestro país, entiéndase la Ley de Salud 4201 y todos los reglamentos que tienen un amparo jurídico como sanitario” declaró el doctor Sehouerer.

Aseguró que eso refleja una debilidad estructural de las instituciones donde se produjeron las amputaciones, porque todos los centros públicos y privados tienen un protocolo epidemiológico que regulan y controlan todo ese procedimiento quirúrgico.

Dijo que cuando hay amputaciones de miembros inferiores y superiores, así como órganos, para darle solución definitiva, “se llevan a una incineradora, en algunos hospitales, otros usan el método antiguo de enterrarlo y otros por irresponsabilidad del sistema de salud, los colocan en fundas, lo echan como desperdicios sólidos en basureros y los camiones los llevan al vertedero como depósito final”.

Enfatizó que esos restos humanos, a los pocos días presentan estado de descomposición, comienza a desarrollar bacterias, microbios y otras cosas que producen el mal olor, y se convierten en un foco infecto contagioso para todos aquellos que estén en el entorno o que hayan manejado ese tipo de producto, por lo que abogó por mayor control sanitario.

“Esto a mí me refleja una irresponsabilidad y una muy poca vigilancia epidemiológica en el hospital o la clínica donde se produjeron esos hechos, porque el Ministerio de Salud es riguroso, comenzando por el viceministerio de Garantía de la Calidad y el viceministerio de Salud Ambiental son muy rigurosos en la preservación y en la aplicación de los protocolos de vigilancia epidemiológica en ese sentido.

Explicó que los hospitales que tienen como programa la liberación de que realizan amputaciones de piernas, manos, extracción de órganos, tienen un protocolo epidemiológico de riguroso cumplimiento.