TRINCHERA DIGITAL.-El terrible drama de caer con covid, la gente ni lo imagina. Solo médicos y enfermeros saben el triste final para quienes llegan a las emergencias cada día y su destino es una entubación, para tratar de llevar algo de oxígenos a los maltrechos pulmones endurecidos e inflexibles debido al virus. Es el amargo momento de la soledad absoluta y de una agonía inmerecida que abate la vida en medio de la impotencia y la ignorancia de los que todavía no conocen ni por alguna pesadilla lo que es en realidad este monstruo de mil cabezas que ataca a la humanidad.
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Un cuadro dantesco es el que a diario se vive frente al hospital Francisco Moscoso Puello, en la parte alta de la capital dominicana, donde familiares y allegados de pacientes ingresados y aislados se cobijan de la intemperie del sol o la lluvia en sus propias lágrimas, esperanzados en poder ver salir vivos del lugar al familiar que libra su propia y quizás última lucha por la vida.
En ese contexto, un reportaje dominical en diariolibre.com destaca que el Gobierno dominicano dispuso desde el pasado miércoles dos de junio el endurecimiento de las medidas preventivas por la pandemia, como una forma de hacer frente a la tercera ola de contagios que, entre otras consecuencias, a la fecha ha comprometido la ocupación hospitalaria en las zonas de mayor incidencia del COVID-19.
Nuevos horarios en el toque de queda, la prohibición de la venta de bebidas alcohólicas para ser consumidas en espacios públicos y privados de uso público, el cierre de mercados binacionales y la orden de reducir la capacidad en establecimientos al 50%, son algunas de las disposiciones del Poder Ejecutivo.
Sin embargo, a la fecha, el aumento en los casos no ha mermado. Este sábado el Ministerio de Salud Pública notificó que 12 personas fallecieron por el coronavirus y se registraron otros 1,784 casos nuevos, para un total de 315,815 contagios.
Las autoridades informaron, además, sobre el registro de un nuevo pico de casos activos, que suman 55,027, representando la mayor cifra desde el inicio de la pandemia. A juicio de especialistas consultados por Diario Libre, en la vigilancia epidemiológica está la respuesta al porqué continúa el incremento en los casos.
Para Carlos Féliz, médico epidemiólogo y salubrista, el problema de la pandemia no se resolverá a menos que se apliquen los principios de la epidemiología y la Salud Pública, complementado con esquemas de vacunación que estén por encima del 95% de cobertura.