REDACCIÓN.-Ocurrió lo impredecible en pleno vuelo como también fue impredecible la destreza, capacidad, control y sagacidad de la mujer que tenía bajo su responsabilidad el avión, cuyo motor derecho estalló en el aire, a 30 mil pies de altura…»En medio del caos, Tammie Jo Shults mantuvo una envidiable calma». Luego del aterrizaje murió una pasajera en un hospital por golpes sufridos por la explosión del motor de la aeronave.
DETALLES
BBC Mundo reporta que la piloto estadounidense avisó con voz serena el martes a la torre de control del aeropuerto de Filadelfia que le faltaba una parte al avión de pasajeros de la compañía Southwest Airlines que pilotaba y que había heridos a bordo.
En una grabación que difundió la cadena NBC News, se le oye a Shults reportar por radio: «Southwest 1380, tenemos un solo motor».
«Nos está faltando una parte del avión, así que tendremos que reducir un poco la velocidad», añadió, explicando a continuación que había pasajeros heridos.
Cuando le preguntaron si la aeronave estaba incendiándose, contestó: «No, no está en llamas, pero falta una parte (…) Dijeron que hay un hueco y que alguien salió por ahí«.
Mientras tanto, algunos pasajeros gritaban y eran advertidos de que se prepararan para el impacto mientras se desprendían las máscaras de oxígeno.
Shults logró aterrizar el avión de la compañía Southwest de emergencia en el aeropuerto de Filadelfia (EE.UU.) en la mañana del martes.
En el incidente falleció la pasajera Jennifer Riordan luego de ser parcialmente succionada a través de una ventana rota por restos del motor averiado.
Algunos pasajeros han agradecido públicamente a Shults el haber evitado una tragedia mayor.
Autoridades militares, además, resaltaron la carrera de Shults como piloto deaviones de combate mientras sirvió durante una década en el ejército de EE.UU.
Shults hizo parte de la primera promoción de pilotos de combate mujeres que operó aviones tácticos.
«Una heroína»
Los pasajeros a bordo del vuelo que iba con destino a Dallas y que transportaba a 149 personas hablaron de Shults como «una heroína estadounidense».
Shults no ha sido nombrada públicamente por la compañía Southwest como la piloto a cargo de ese vuelo. Fueron los pasajeros los que la identificaron.
«Mucha resistencia»
La suegra de Shults y algunos de sus allegados describieron a la piloto como una pionera en el campo de la aviación para las mujeres en Estados Unidos.
Una de las compañeras de estudios de Shults en la Universidad MidAmerica (Kansas), Cindy Foster, le dijo al diario Kansas City Star que cuando Shults se enlistó en el ejército encontró «mucha resistencia» por ser mujer.
«Escogió la Marina luego de que la Fuerza Aérea le negara la oportunidad de convertirse en piloto«, dijo.
«Ella sabía que tenía que trabajar más duro que cualquier otro», añadió.
Debido a una ley en EE.UU. que excluía a las mujeres de ocupar posiciones de combate, Shults no pudo unirse a un escuadrón sino que trabajó en labores de entrenamiento, según reportó el Washington Post.
Según el medio, su esposo, Dean Shults, sí hizo parte de un grupo de combate y ahora trabaja en Southwest Airlines, al igual que la piloto.
La secretaria de Transporte de EE.UU., Elaine Chao, felicitó a la tripulación por la respuesta al accidente.
«Elogio a los pilotos que aterrizaron con seguridad el avión, y a la tripulación y los pasajeros que brindaron apoyo y atención a los heridos, evitando algo que podría haber sido mucho peor», dijo.