SANTO DOMINGO ESTE, Boca Chica.-Un terrible mal ejemplo que se repite: Fueron apresados varios miembros de una banda de atracadores, entre ellos un militar y una mujer policía que operaba en la zona oriental del país y cuyo rastro fue posible por pistas logradas por investigadores después que asesinaron a un agente policial en momento que lo atracaban para despojarlo de un motor.
De acuerdo con reportes oficiales, la banda habría asesinado a un raso de la Policía Nacional al este resistirse a ser despojado de sus pertenencias incluyendo una motocicleta y en cuyo acto también cayó abatido uno de los delincuentes.
DETALLES
Entre los apresados la madrugada de este viernes hay un cabo de la Fuerza Aérea y su pareja sentimental, una miembro de la Policía Nacional, puesta en adicción a la Policía Escolar, quienes manejaron una trama en la que se indica que se presentaron a un destacamento policial en Santo Domingo Este a interponer una denuncia de pérdida del arma de reglamento de ésta y que se dirigieron allí en el mismo vehículo en el que habían cometido el asalto.
En este lugar fueron apresados el raso de la Policía Jocaira Amaris Santos, residente en la calle 24 de junio de la zona turística de Boca Chica, quien narró «falsamente» que había sido despojada de su arma de reglamento la pistola CZP07, No.8522359, perteneciente a la Policía Escolar.
Además detuvieron al Cabo de la FARD, Anderson Peguero Méndez, residente en San Luis; a Freddy Mojica Rincón, residente en Andrés, Boca Chica; Arturo Rafael Brea en el barrio Invi de Andrés, y una menor cuyo nombre se omite por asunto legal, quienes participaron en el atraco y asesinato del raso policial Joel Alberto Lugo Ramón.
En el hecho también resultó muerto el sindicado atracador y parte del grupo Reymon Joel Mejía, quien residía en el distrito municipal San Luis, municipio Santo Domingo Este.
Trascendió que el grupo constituía una peligrosa banda de delincuentes que operaba entre Santo Domingo Este, San Luis, San Isidro y que tenía como base de operación Boca Chica, y se estima que otros miembros de instituciones militares y policiales pudieran estar envuelto en las operaciones de robos, atracos y asesinatos en estas zonas.