MANCHESTER, Reino Unido.-Después de la masacre, todo es confusión en torno al famoso Manchester Arena, donde un espectáculo de la artista estadounidense Ariana Grande fue blanco de un ataque terrorista con un saldo preliminar de 19 muertos y 60 heridos, muchos de gravedad por las heridas de fragmentos emanados por la explosión. El autodenominado Estado Islámico-ISI- ya ha se atribuído el acto y todo el país amaneció este martes en una especie de Estado de Sitio con las seguridad redoblada y el cierre de varias estaciones de trenes. De su lado, la artista ha reaccionado indignada por el ataque aunque, de acuerdo con algunos de sus asistentes, ella se encuentra en perfecto estado de salud. Entre las víctimas hay muchos niños y niñas, según cifras oficiales.
BBC Mundo reseña que un vocero de la artista informó que tanto ella como su equipo se encuentran bien y no sufrieron daños durante el hecho.
Una hora después de lo sucedido en el Manchester Arena, la policía tuvo que realizar una explosión controlada en el parque Cathedral Gardens, cerca del lugar donde se produjo el incidente, debido a que encontró un objeto sospechoso.
Finalmente se constató que se trataba sólo de ropa abandonada.
Desde el lugar de los hechos: Tom Mullen, periodista de la BBC
La actividad policial alrededor del Manchester Arena es enorme. Hay luces intermitentes azules y cordones de seguridad en casi cada esquina de la zona.
Una amplia área alrededor del lugar fue completamente cerrada, y la escena del crimen parece estar ampliándose, con la policía empujando a la gente más y más atrás.
He hablado con personas que están sacudidas, asustadas y a menudo llorando.
Una cosa que es evidente es que hay muchos, muchos jóvenes, algunos de ellos con padres o tutores. Una madre me dijo que su prioridad era simplemente conseguir que sus hijas regresaran a casa.
Otros han descrito ver personas cubiertas de sangre, o ser tratadas por paramédicos. Todavía hay un enorme sentimiento de confusión y la gente está constantemente buscando información mientras deja que sus familias sepan que están a salvo.
Los testimonios
Testigos relataron que después de que se escuchó «un fuerte ruido», la confusión y el pánico se apoderó de los presentes en el concierto.
Robert Tempkin, de 22 años, contó como «todo el mundo estaba gritando y corriendo, había abrigos y teléfonos de la gente en el suelo«.
«Algunas personas gritaban que habían visto sangre. Había un montón de ambulancias, vi a alguien siendo tratado y no podría decir lo que le había sucedido», añadió.
Josh Elliott, hablando a BBC Radio 5, dijo que estaba sorprendido por las noticias de las muertes.
«Fue un alboroto, fue horrible. Nos levantamos cuando pensamos que era seguro y salimos lo más rápido posible».
Elliot narró que fuera del Manchester Arena «la gente solo lloraba y lloraba«. «Había vehículos de la policía por todas partes«.
«Sólo queríamos salir lo más rápido posible porque no sabíamos qué estaba pasando», relató.
Michelle Sullivan asistió al concierto con sus hijas, de 12 y 15 años.
«Fue muy aterrador», dijo. «Justo cuando las luces se apagaron oímos una explosión muy fuerte. Todos gritaron», señaló.