FLORIDA, Miami, EUA.-Mientras Nueva York es azotado por una feroz tormenta invernal y Canadá convertida en un block de hielo en la capital de Florida, como resultado del frío extremo ha empezado a nevar ante la mirada atónita de sus pobladores.
Un despacho de la agencia (EFE) informa sobre la ola de frío que afecta a gran parte de
Estados Unidos que hizo este miércoles que nevara en Tallahassee, la capital del
estado de Florida, y obligó a cerrar parte de una carretera
interestatal, informaron medios locales.
A las 8.30 horas (12.30 GMT), el Servicio Meteorológico Nacional
registró en el tejado de su sede en Tallahassee (norte del estado)
una acumulación de 0.1 pulgadas (2,5 milímetros) de
“nieve/aguanieve”, informó el canal de noticias Fox 13.
La policía de Tallahassee pidió a los ciudadanos que “tengan
extrema cautela al manejar y no se expongan al frío por mucho tiempo sin estar equipados satisfactoriamente”.
Desde este martes estaba en vigor una advertencia de tormenta
invernal en la que se avisaba de la posibilidad de nieve en el norte del estado, en la zona fronteriza con Georgia, donde el gobernador Nathan Deal ha declarado la emergencia en 28 condados.
El gobernador de Florida, Rick Scott, alertó el martes a
turistas, residentes y negocios del norte del “Estado del sol” a
prepararse para enfrentar condiciones de frío extremo para esta
noche e incluso posibilidades de acumulación de nieve.
Scott hizo un llamado a prepararse “para las condiciones
climáticas extremadamente frías, incluyendo posibles acumulaciones de nieve, aguanieve o hielo”.
Aunque las temperaturas no se pueden comparar con las que se
están registrando más al norte, para los floridanos, que
prácticamente no conocen más frío que el del aire acondicionado ni están preparados para soportarlo, las que marcan los termómetros en algunas zonas del estado (entre los 40 y los 30 grados Fahrenheit, entre 4,4 y -1,1 grados Celsius) asustan.
Para mañana está previsto que bajen en algunos lugares a entre 20 y 30 grados Fahrenheit (-6 y -1 grados Celsius)
En Jacksonville, en el extremo nororiental de Florida, las
oficinas públicas están hoy cerradas y solo trabaja el personal que
realiza tareas esenciales.