Karim anunció este jueves que negocia su candidatura presidencial con tres partidos

SANTO DOMINGO.-El llamado «Príncipe» Karim -Karim Abu-Naba’a- dijo en la emisora Z101 este viernes que será candidato presidencial en las elecciones del 2020 y que negocia con tres partidos, incluyendo el Partido Verde a lo que atribuyó el color del pelo y a que apoya la Marcha Verde. En una comparecencia en El Gobierno de la Mañana, el controversial personaje se mofó de quienes lo critican y dijo que viajará en las próximas horas a Dubai, solo para lanzarse en paracaídas y grabar un vídeo de promoción.

Entre otras «bellezas», Karim dijo sin mas para allá ni mas para acá que en las pasadas elecciones el presidente del Bloque Institucional Social Demócrata -BIS-, José Francisco Peña Guaba le pidió 48 millones de pesos a cambio de la candidatura presidencial por esa agrupación y que se negó al igual que otra demanda que atribuyó a Luis Acosta Moreta, de la Unión Demócrata Cristiana-UDC- de quien se refirió diciendo que «ese es el primer gallo que pone un huevo».

Entre otras lindezas, Karim dijo que cuenta con mucho dinero ya que ha trabajado junto a su padre, un multimillonario jordano con ciudadanía dominicana que se dedica al negocio del petróleo y el asfalto.

Con relación al incidente por el aterrizaje de su helicóptero en el Estadio Cibao dijo que si el gobierno «no me suelta» va a revelar la identidad «de un come solo» que se compró una casa en 200 millones de pesos.

Asímismo, dijo que denominación que a cualquiera le parecería jocosa. Pero más allá de las extravagancias de este nombre, lo peor es lo que ha demostrado ser en el país el joven Karim Abu-Naba’a, donde parece inmune a cualquier violación y acusaciones.

A lo largo de casi una década República Dominicana ha sido testigo de un escándalo tras otro escenificado por Abu-Naba’a, el más reciente: hacer aterrizar su helicóptero en pleno estadio Cibao.

El acto fue calificado como peligroso por las autoridades.

Dentro de su historial se encuentran demandas por falsificación de documentos, amenazas de muerte, porte ilegal de armas y otros actos a los que las autoridades dominicanas no han podido poner freno.