SANTIAGO DE LOS CABALLEROS.-Un velo de misterio rodea el supuesto secuestro de un empresario de esta ciudad que la mañana de este lunes se presentó en su residencia acompañado de un colombiano y que pasado el mediodía era interrogado por oficiales de la Dirección de Investigaciones Criminales -DICRIM-, en la sede central del Comando Regional Norte de la Policía Nacional, a donde fue conducido por agentes de esa institución.
DETALLES
La Dirección Central de Investigaciones Criminales (DICRIM) de la Policía interrogaba al empresario Epifanio Arias (Fernando) y al colombiano Luis Eduardo Méndez (Paisa), luego que el primero supuestamente fuera secuestrado la semana pasada y apareciera en su residencia este lunes. Se dijo que los secuestradores pedían cinco millones de dólares como rescate.
En el interrogatorio participaban miembros del Ministerio Público, según se supo.
No se han ofrecido detalles sobre el secuestro de Arias, quien es propietario de varios negocios en Santiago, entre ellos la plaza Moli, ubicada en la avenida Circunvalación próximo a Cienfuegos. También se ha dicho que es propietario de un negocio de renta de vehículos en Nueva York.
Nadie se ha referido o revelado si se pagó el monto citado para su liberación.
El coronel Juan Guzmán Badía, vocero de la Policía del Cibao, informó que Arias fue recibido por familiares y adelantó que continúan las indagatorias, de las que se darán detalles en el transcurso del día.
Fue llevado al Comando Cibao Central de la Policía Nacional el empresario que había sido reportado como secuestrado la semana pasada y la mañana de este lunes se apareció en su casa.
Se presume que el hombre será sometido a un interrogatorio.
Epifania Arias llegó a la sede de la Policía en Santiago en una camioneta de doble cabina de color blanco y de inmediato fue introducido por varios agentes al lugar. No contestó preguntas de la prensa.
Desde la semana pasada Arias, quien de acuerdo a informes es propietario de una discoteca en la ciudad de Santiago fue reportado como secuestrado y supuestamente para su liberación sus captores pedían 5 millones de dólares.
