Ya el paìs cuenta con Ley de Extinciòn de Dominio; solo falta la promulgaciòn del Poder Ejecutivo

TRINCHERA DIGITAL.-Luego de 12 años de ser una especie de «papa caliente» o una granada que nadie querìa le explotara encima, el Senado aprobò a unanimidad el polèmico proyecto de Ley de Extinciòn de Dominio, que ahora pasa al Poder Ejecutivo para su conversiòn oficial mediante su promulgaciòn u observaciòn por parte del Presidente Luis Abinader. Todo indica que dicho proyecto serà convertido en Ley con la promulgaciòn del Ejecutivo. Tambièn habìa sido aprobado a unanimidad en la càmara de Diputados con al menos 40 modificaciones del original enviado por el senado en la vìspera.

DETALLES

La Ley regirà la norma de extinción de dominio para el decomiso de bienes ilícitos en la República Dominicana acogiendo las más de cuarenta enmiendas que hizo la Cámara de Diputados.

La disposiciòn deja atrás más de 12 años de debates en la Cámara de Diputados como en el Senado y fue sancionada y aprobada en ambas càmaras de manera unánime, siendo su categoría, orgánica.

En este día final de la primera legislatura, los senadores se reunieron para revisar más de 40 modificaciones y concluyeron en que las enmiendas mejoran mucho más la pieza. Este precepto se analizó en una comisión bicameral por espacio de año y medio.

El proyecto de ley de extinción de dominio resurge de la fusión de dos proyectos de ley de la misma naturaleza, autoría del senador Antonio Taveras Guzmán (provincia Santo Domingo), mientras que un segundo proyecto es de los senadores Félix Bautista, Aris Yván Lorenzo y José Del Castillo Saviñón.

Tiene el objetivo de establecer el marco legal para la regulación de la extinción de dominio de bienes ilícitos, definir las consecuencias y facultades de las autoridades responsables de su aplicación, reconocer los derechos y garantías de los intervinientes, sentar los principios fundamentales para el funcionamiento del sistema de administración de los bienes decomisados, así como el procedimiento requerido para su declaración judicial.