La relación a nivel de narcotráfico de César el Abusador, apresado este lunes en Cartagena, era con el Clan del Golfo, considerado “el cártel más grande y poderoso de Sudamérica”, por cuyo cabecilla la Administración para el Control de Drogas (DEA) ofrece cinco millones de dólares, vivo o muerto. El grupo, que también se hace llamar Autodefensas Gaitanistas de Colombia, está liderado por Dairo Antonio Úsuga, alias “Otoniel” o “Mauricio” o “Mao”.
El Clan del Golfo controla más de la mitad de la droga que sale de Colombia y opera en 13 de los 32 departamentos del país, la mayoría de los cuales se encuentran en la zona noroeste. En 2016, durante el gobierno de Juan Manuel Santos, los Gaitanistas fueron declarados como un “grupo armado organizado”, por lo que el Ejército podía combatirlos y a través de la Fuerza Aérea bombardear las zonas donde se encontraban en ese momento.